La inteligencia es aventura, emoción, alegría. La inteligencia es vivir en este momento, no anhelar el futuro. La inteligencia es no pensar en el pasado y no preocuparse por el futuro; el pasado ya no existe, el futuro aún no existe. La inteligencia es aprovechar al máximo el momento presente, que está disponible. El futuro saldrá de él. Si este momento se ha vivido con deleite y alegría, el momento siguiente va a nacer de él. Traerá más alegría naturalmente, pero no hay necesidad de preocuparse por él. Si mi hoy ha sido dorado, mi mañana será aún más dorado.
¿De dónde vendrá?
Saldrá de hoy.
Si esta vida ha sido una bendición, mi vida próxima será una bendición más elevada.
Si esta vida ha sido una bendición, mi vida próxima será una bendición más elevada.
¿De dónde puede venir?
Saldrá de mí, de mi experiencia vivida.
De manera que una persona inteligente no está preocupada por el cielo y el infierno, no está preocupada por la vida después de la muerte, no está preocupada ni siquiera por Dios, no está preocupada ni siquiera por el alma. Una persona inteligente simplemente vive inteligentemente, y Dios y el alma y el cielo y el nirvana vienen naturalmente.
Vives creyendo; la creencia no es inteligente. Vive sabiendo; saber es inteligencia. Y la inteligencia es meditación.
Las personas sin inteligencia también meditan, pero, por supuesto, meditan de una manera carente de inteligencia. Piensan que tienen que ir a la iglesia una hora todos los domingos; esa hora hay que dársela a la religión. Esta es una manera nada inteligente de relacionarse con la religión. ¿Qué tiene que ver la Iglesia? Tu vida verdadera está en los otros seis días. El domingo no es tu día real. Vivirás irreligiosamente durante seis días, ¿y luego vas una hora o dos a la iglesia? ¿A quién estás tratando de engañar?
Vives creyendo; la creencia no es inteligente. Vive sabiendo; saber es inteligencia. Y la inteligencia es meditación.
Las personas sin inteligencia también meditan, pero, por supuesto, meditan de una manera carente de inteligencia. Piensan que tienen que ir a la iglesia una hora todos los domingos; esa hora hay que dársela a la religión. Esta es una manera nada inteligente de relacionarse con la religión. ¿Qué tiene que ver la Iglesia? Tu vida verdadera está en los otros seis días. El domingo no es tu día real. Vivirás irreligiosamente durante seis días, ¿y luego vas una hora o dos a la iglesia? ¿A quién estás tratando de engañar?
Tratando de engañar a Dios con que eres devoto...
Osho-"Inteligencia"
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