sábado, 22 de mayo de 2010

HABLEMOS ACERCA DE LA CONFIANZA

¿Confías en ti?



Hay que comprender un poco más claramente el fenómeno de la confianza... en primer lugar la confianza ha de ser incondicional, no porque la naturaleza satisfaga todas tus necesidades, porque la existencia te preste ayuda, te apoye...

¿ Y si no te apoya?

¿Y si pone obtáculos en tu camino?

Entonces desaparecerá tu confianza.

¡¡¡¡  Esa confianza no es auténtica  !!!!

(no es como escuchar a tus padres, escuchar a tus maestros(encadenadores) o escuchar a la sociedad corruptora de ideas, pensamientos, creencias, ideologias (tontologias), confiando en ellas... o mejor que eso.. respetándolas... al fin cada ave vuela con un norte diferente... y una verdad puede ser mentira.. o una mentira puede ser una verdad... pero todo y todo eso está y vive por fuera... no por dentro de ti... no vive en tu corazón... en tu interior más profundo... y es a ese interior es a donde...debemos llegar... solo voladas de una florcita violácea...)




(llego a ti... por que confío...)



Y otra cosa que hay que recordar: la confianza en la existencia sólo puede ser verdadera si confías en ti mismo, porque tú eres la experiencia más proxima de la existencia.
Si no, cuando las cosas vayan bién, confiarás, y cuando no vayan bien, la confianza empezará a desaparecer.

La confianza básica no debe depositarse en la existencia, sino que debe estar dentro de ti.., deberías a ser más consciente y a estar más alerta, para confiar en ti mismo.

¿ Confias en ti mismo?

Si confías en ti mismo, no debe ser por ninguna razón concreta. Tiene que ser una confianza incondicional. Y de esa confianza incondicional brotarán muchas ramas, y te convertirás en un árbol enorme de frondoso follaje.
Confiarás en el Amor, confiarás en la Verdad, en la Divinidad, en la Belleza: sencillamente confiarás porque tu corazón está lleno de confianza, sin siquiera una sombra de desconfianza. incluso si quieres desconfiar, no podrás.
Solo cuando no puedes desconfiar, incluso si quieres hacerlo, has llegado al centro mismo de tu ser, de donde brota la confianza en la existencia, en la vida, en las personas, en los árboles.

Y eso no se debe a ninguna condición:

¡¡ La Vida es tal Dicha, tal Éxtasis!!

En cuanto la hayas probado en tu interior querrás probarla en el Cosmos Entero !!!

Buena cosa es que pienses en la confianza. Es bueno que la confianza... qu la idea rodee tu mente y su atmósfera. No te ofendas si te digo que ha llegado el momento en que deberías darle un giro a tu confianza, volver la flecha hacia ti.


¿Confías en ti mismo?


Deberías empezar por el principio, no por la mitad o por el final. Y estás empezando por el final. Así no se puede progresar, porque te puedes perder la mitad. Empieza por el principio y deja que todo progrese de una forma espontánea.

Crecerá, progresará. Tú ser posee un enorme potencial de crecimiento.




Empieza por el Ser.


OSHO

martes, 11 de mayo de 2010

"LA VERDADERA NATURALEZA ES TU NATURALEZA ETERNA"-OSHO


No puedes tenerla y no tenerla, no es algo que viene y va, es tú.
¿Cómo va a ir y venir?
Es tu ser. Es tu base misma. No puede ser unas veces y no ser otras; siempre es.
Así que éste debería ser el criterio para un buscador de la verdad, la naturaleza o el Tao: llegar en nuestro ser al punto que permanece siempre, ese que estuvo antes de que nacieses y estará después de que hayas muerto.

Es el centro.

La circunferencia cambia; el centro permanece absolutamente eterno: está más allá del tiempo, nada puede afectarle, nada puede modificarlo, nada le toca nunca realmente; permanece más allá del alcance del mundo externo.
Ve al mar y obsérvalo. Hay millones de olas, pero en sus profundidades el mar permanece calmado y tranquilo, en profunda meditación; el alboroto está sólo en la superficie, sólo en la superficie, donde el mar se encuentra con el mundo externo, los vientos. Por lo demás, en sí, siempre permanece él mismo; ni siquiera una ola; nada cambia.

Contigo sucede lo mismo. Justo en la superficie, donde te encuentras con los demás, hay agitación, ansiedad, ira, apegos, avaricia, deseo: justo en la superficie, donde llegan los vientos y te tocan. Y si permaneces en la superficie, no puedes cambiar este fenómeno cambiante; seguirá ahí.
Mucha gente intenta cambiarlo ahí, en la circunferencia. Luchan con ello, tratan de no dejar que surja una ola.

Y a través de su lucha surgen incluso más olas, porque cuando el mar lucha con el viento, hay más agitación: ahora no sólo contribuirá el viento, el mar también contribuirá y habrá un caos tremendo en la superficie.

Todos los moralistas intentan cambiar al hombre en la periferia.
Tu carácter es la periferia: tú no traes ningún carácter al mundo, vienes absolutamente sin carácter, como una hoja en blanco, y todo eso que llamas tu carácter es inscrito en ella por otros.

Tus padres, la sociedad, los profesores, las enseñanzas, todo son condicionamientos.

Tú vienes como una hoja en blanco, y todo lo que hay escrito en ti viene de otros; así que, a no ser que te vuelvas una hoja en blanco de nuevo, no sabrás lo que es la naturaleza, no sabrás lo que es Brahma, no sabrás lo que es Tao.

OSHO